En el 2015 los líderes del mundo presentaron los Objetivos de Desarrollo Sostenible, una serie de metas que buscan la prosperidad del mundo. El objetivo 11.7 menciona lo siguiente:

“De aquí a 2030, proporcionar acceso universal a zonas verdes y espacios públicos seguros, inclusivos y accesibles, en particular para las mujeres y los niños, las personas de edad y las personas con discapacidad.”

Con base en este enunciado se inició en diferentes partes del mundo investigaciones para identificar los principales beneficios que tienen los espacios verdes, como los bosques, sobre la salud humana. En España, inclusive, se iniciaron desde el 2017 las investigaciones en conjunto para determinar el efecto de los compuestos que emiten las plantas de sus bosques sobre las personas que interactúan con ellos, para luego crear itinerarios saludables que la gente pudiera hacer.

Tanto esta como otra serie de investigaciones han reunido pruebas suficientes para confirmar que el contacto con los bosques generan una serie de beneficios para todos, aquí te mencionamos cinco de ellos:

Mejora tu sistema inmunológico

Un estudio realizado en Holanda determinó que mientras más áreas verdes habían cerca de las residenciales (al menos 1 km de distancia) la incidencia de enfermedades respiratorias, digestivas y hasta cardiovasculares era menor que en las que no. Esto fue más significativo en niños menores de 12 años y adultos entre los 45 y 65 años de edad.

Disminuye el riesgo de padecer sobrepeso y obesidad

El tener espacios naturales cerca fomenta el ejercicio de tipo moderado en la población. Es por esto que se ha encontrado un menor Índice de Masa Corporal en las personas que viven en lugares rodeados de bosques o áreas verdes. Otros estudios que han reforzado esta idea son los que han confirmado que el mismo índice es mayor en personas que viven en zonas totalmente urbanizadas, sin ningún tipo de acceso a espacios naturales.

Mantendrás una buena salud mental

Trece estudios científicos diferentes han demostrado que las personas que viven sin ningún área verde cercana viven con mayor irritabilidad y niveles de estrés, al contrario de las que sí. Otros de las afecciones mentales que se ven reducidas a la hora de entrar en contacto con bosques o jardines son: el estrés, la ansiedad, el insomnio y el estado de ánimo depresivo. A esta capacidad que tienen, la naturaleza responde al equilibrio mental que se llama experiencia restaurativa y fue llamado así por los investigadores Rachel y Steven Kaplan.

Tendrás un corazón más sano

Visitar un bosque y caminar por sus senderos frecuentemente puede producir en tu cuerpo una mayor variabilidad en la frecuencia cardiaca, puede reducir del ritmo cardíaco, y también la presión arterial. Esto también ha sido comprobado por dos estudios experimentales, tres ecológicos, tres transversales y uno de cohorte prospectivo, realizados en países de primer mundo.

Vivirás por más tiempo

Si mantienes una buena salud física y mental, tu expectativa de vida aumentará. Como hemos mencionado en los cuatro puntos anteriores, tener contacto con áreas verdes te mantendrá alejados de afecciones como la obesidad y la diabetes, que en la actualidad son las enfermedades con mayor índice de mortalidad en el mundo.

Además de eso, se ha comprobado que la alta tala de árboles ha sido relacionada con un aumento de enfermedades cardiacas y respiratorias en Estados Unidos, por lo que ahora se están haciendo esfuerzos de manera mundial por disminuir la tala y recuperar los espacios verdes, en especial en las zonas urbanas.

Baños de Bosque

No hay duda que los bosques son la representación por excelencia de la naturaleza y los humanos, como especie, hemos estado en contacto con ellos desde los inicios de nuestro proceso evolutivo. Es por ello que en Japón desde los años 80 han promovido los Baños de bosque (Shinrinyoku en japonés) y desde ese momento, hasta la actualidad, al menos 2 millones de personas lo practican. Este es una práctica que consiste en pasar tiempo en el bosque, con el objetivo de mejorar la salud, el bienestar y la felicidad.

En países desarrollados como Estados Unidos, Corea, Alemania, Australia y Canadá han empezado a promover también esta práctica para asegurar el bienestar de sus pobladores porque está más que comprobado que los beneficios para la salud son numerosas.

Por suerte, nuestro país está compuesto en dos terceras partes por bosque y no es difícil, ni lejano, encontrar espacios naturales donde podamos ir a ejercitarnos o simplemente disfrutar de la comodidad que ofrece la sombra de los árboles y el aire puro que producen. Es probable que tan solo una visita a los bosques una vez a la semana sea la respuesta a ciertas afecciones que producen el estrés diario y algunas enfermedades constantes en la ciudad.

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